Chaqueta Ermes de Tucano Urbano, discreción y efectiva elegancia: Prueba ultra fondo

Con esta prenda, Tucano Urbano añade otro elemento más que reafirma esa nueva línea de creaciones para el motorista que nos presenta en sociedad como un individuo más, que se confunde con el resto, cuando se ha apeado de su moto.

Una prueba extensa y variada

Hemos probado esta chaqueta Ermes durante los meses más fríos, y a lo largo de más de tres mil kilómetros, sobre un amplio ramillete de motos que comprende las categorías y posturas más dispares del mercado. Desde la excitación de una hiperdeportiva hasta la placidez de una custom, pasando por la practicidad de un scooter medio o por el modo más versátil de la moto, mostrado en una maxitrail; una lista de motos que reflejamos para nuestros lectores en el final del reportaje.

Definición y sensaciones en parado

La Ermes de Tucano Urbano es una Chaqueta touring en tres cuartos, de corte Black Label, con protecciones extraíbles en los codos y en los hombros fabricadas en el material D3O (descripción de este material al final del reportaje), con el aspecto de una silicona tan ergonómica como absorbente.

Pero, sumado a las propiedades livianas del D3O, lo primero que llama la atención al ponerte esta chaqueta Tucano Ermes es, precisamente, una ligereza que casi transmite la primera sensación sobre la moto de conducir desprotegido o desabrigado. Una sensación que desaparece a los pocos kilómetros recorridos atravesando el frío, y a medida que se siente el calor interno preservado por los tejidos de la chaqueta. Un tejido exterior confeccionado en poliamida Oxford respirable, con propiedades cortaviento y además impermeable con elevada columna de agua, con sus costuras selladas y con una considerable resistencia calculada frente a las abrasiones. En lo que se refiere al interior, suave y mullido, cuenta con un forro en red 3D de poliéster, más un chaleco térmico extraíble, también de poliéster, guardando todo el conjunto una hechura que permite ir vestido debajo con traje y corbata, respetando sus formas. En lo que respecta a los bolsillos, son cuatro exteriores, con una gran capacidad, con un cierre de doble solapa sujeta por clips en los inferiores, y con una cremallera sellada, también con una solapa por encima, en los superiores, situados justo a la altura del pecho. Además, cuenta con dos interiores.

Ajustes

Por otro lado, la chaqueta Ermes es adaptable a nuestra anatomía por medio de varios ajustes. Uno en las mangas, a la altura de los bíceps, con una cremallera vertical rematada por un clip. Este detalle impide que el sobrante de las mangas vaya sacudiendo al viento detrás de los brazos. A la altura de las muñecas, emplea el mismo sistema para ajustar los puños y acoplar los guantes, bien por fuera o bien por dentro.  Abajo, en los laterales, también cuenta con cremalleras que abren un pliego extra para hacer más ancha y adaptable a una postura con el tronco inclinado hacia delante. Y por último, a la altura de la cintura ofrece un ajuste con un tira y hebilla.

Al cerrar la cremallera central, la chaqueta Ermes envuelve los riñones con una protección lumbar que Tucano Urbano acopla a modo de faja. Finalmente,  el cuello se ajusta mediante una solapa abrochada a dos clips colocados en línea para ceñir su cierre en mayor o menor medida.

En marcha

Protección frente al viento

Sencillamente no se filtra ni una micra, yendo enfrentado por completo al flujo del aire, ya sea tras el manillar de una naked, más aún tras el de una trail sin protección, o, en el caso más extremo: conduciendo expuesto sobre una custom durante una jornada de viento helado. El interior de la chaqueta Ermes se siente tan aislado que su envoltorio parece sencillamente hermético.

En cuanto a las mangas, lo cierto es que probé a ajustar los guantes de las dos formas posibles: por encima de la chaqueta, o por dentro de ella. Para hacerlo del primer modo, necesitas un guante con la muñeca tal vez un par centímetros más amplia y más larga que para otras prendas de moto; pero, de todos modos, no estamos hablando de la manopla de un mosquetero. Y en el caso de llevar esa parte del guante por dentro de la manga, tendríamos que alcanzar una velocidad sancionable para que empezáramos a sentir la filtración del viento en la base de nuestros antebrazos, por lo que, viajando a 120, el cuerpo y los brazos se mantienen bastante aislados.

Bajo la lluvia

La Poliamida Oxford de la chaqueta Ermes constituye su recurso para combatir la humedad y la lluvia. Aunque no tuvimos ocasión de probarla bajo un verdadero aguacero, sí lo hicimos con una lluvia constante, que, con una velocidad de autopista, incrementa su caudal hasta convertirse en intensa. 40 kms después, estaba completamente seco por dentro. Qué duda cabe de que la doble solapa central, así como las cremalleras con cierre sellado, contribuyen con su estanqueidad a esta barrera contra la lluvia.

En cuanto a la seguridad del motorista para el caso de vivir la fatalidad de una caída, la chaqueta cuenta con esa calculada resistencia a la abrasión, más las cinco protecciones de Kevlar, que hemos comentado y que desde luego en apariencia, no resultan meros elementos de compromiso, sino que muestran una capacidad a la altura de la calidad general que ofrece la prenda, y la propia línea completa de Tucano Urbano.

Para distintas motos

Las cremalleras laterales permiten ajustar la chaqueta Ermes a la postura que nos marque cada moto que vayamos a conducir, incluso con el tronco doblado sobre una súper deportiva, si bien es cierto que esta chaqueta Tucano Urbano no está directamente diseñada para modelos así.

Como extra inédito en una chaqueta, añadiremos la cinta que cruza todo el interior en diagonal para transportarla en bandolera, una vez que nos hayamos desprendido de ella.

De noche

Efectivamente, la chaqueta Tucano Urabano Ermes lleva plegada la señalización reflectante en los puños y en el cuello; desplegándola, si es nuestra voluntad, durante la conducción nocturna. Estos elementos de seguridad remarcan su importancia en usuarios de motos y scooters de 125, cada vez más numerosos, para los que ser vistos por detrás resulta particularmente vital en las avenidas más amplias y, sobre todo, en las vías de circunvalación, donde sus limitadas prestaciones les colocan a veces evidencia –por no decir “a tiro” de los coches-.

El Desgaste

Después de un año de uso y un buen puñado de kilómetros, la chaqueta Ermes se llevó también unas cuantas sudadas en su interior, por no calcular bien la caprichosa meteorología que siempre protagoniza los albores de la primavera, ni los veranos prologados hasta el centro del otoño. El forro interior en red 3D de poliéster desaloja con fluidez el exceso de calor. De igual forma, tras el transcurso de un café colgada sobre el respaldo de una silla, mostraba ese interior completamente seco, cuando la había dejado aireándose después de haber cubierto un acalorado trayecto.

El tejido exterior es sufrido donde los haya. Su corte elegante y el sobrio tono de tierra que lo tiñe pueden transmitir cierta imagen de delicadeza. Nada más lejos de la realidad. El viento, la lluvia y sobre todo el hollín en suspensión, dentro de la atmósfera urbana, no muestran ninguna huella sobre la piliamida Oxford, que, como hemos dicho, compone el tejido principal de esta chaqueta Ermes. Sobre las cremalleras, decir que muestras una calidad Premium, no sólo en su aspecto, también en su funcionamiento, una y otra vez, que parece quedar garantizado para miles de aperturas y cierres.

Por último, en este apartado, después de un sinfín de ocasiones de vestirnos y desvestirnos con esta chaqueta Ermes, las mangas mantienen su forma intacta e idéntica a la que tenían cuando nos la entregaron, sin desbocarse ni un milímetro a la altura de las muñecas. Lo mismo ocurre con su interior, sintiendo al paso de la mano la misma consistencia cada vez que hemos metido el brazo por ellas en las últimas ocasiones. Por añadidura, el cuello y el contorno que cierra el bajo de la chaqueta a la altura del medio muslo tampoco muestran ni un solo milímetro de deformación o debilidad. Lo mismo ocurre con el desgaste por roce en general: No se aprecia ni la más mínima huella.

Sobre el DO3

En realidad el D3O es un fluido no newtoniano, no tóxico, de baja densidad. Su fluidez le permite amoldarse fácilmente a la forma de nuestro cuerpo y su baja densidad lo hace ligero y fácil de llevar acoplado en cualquier prenda. Sin embargo, lo más destacable y lo que más lo diferencia de la mayoría de fluidos conocidos es que, cuando es sometido a una fuerza brusca, una parte del golpe se absorbe dispersando la energía. La clave de este material es proporcionar las propiedades anti golpes de un fluido a una sustancia sólida. Las moléculas “inteligentes” del D3O se adaptan a la estructura de nuestro cuerpo cuando el movimiento es normal, pero al recibir un golpe, al instante, las moléculas se concentran en el punto de impacto y absorben toda la fuerza que posee el golpe. Cuando la fuerza del golpe se disipa, gracias a su elasticidad, rápidamente retoman su forma primitiva. Todo este proceso se puede repetir sin que el tejido se rompa y así se disminuyen los daños sobre nuestro cuerpo.

Mejorable

-Los clips de cierre guardan una discreción, en sincronía con la elegancia general de la prenda; algo que inevitablemente les debilita frente un viento salvaje y feroz, como el que sufrí más de un día en la autopista, atacando desde un flanco por una de esas ciclogénesis activas. Los clips no resistieron la brutal presión que convertía la solapa central, que se monta sobre la cremallera, en una auténtica vela mayor en medio de la tempestad.

-Con el cierre del cuello abrochado en su clip más cerrado, seguramente, los más quemados echarán de menos la solapa un punto más ceñida a la garganta, si bien es verdad que, en invierno, la braga o el soto-casco cumplen el papel de relleno a medida para cubrir esta pequeña holgura.

Precio

219 € IVA incluido

Precio Espaldera : 60 € IVA incluido

Valoración Final

Han sido kilómetros urbanos, en medio de los atascos, o callejeando por los núcleos más céntricos, lo mismo que tomando las vías de circunvalación, con o sin tráfico, de día y de noche; han sido también pesados kilómetros de autovía sacudidos, a veces, por un viento feroz, o rutas plagadas de curvas por carreteras de segundo orden, donde hemos probado la libertad de movimientos que permite esta prenda, tan necesarios, por muy recatada que sea nuestra conducción en estos tramos. Han sido kilómetros, también con lluvia, incluso con alguna ventisca glaciar para llegar a una conclusión final:

La impresión general que nos ha quedado tras esta prueba tan prolongada y variada, es la de que, con su aspecto discreto y su corte elegante, cuesta trabajo imaginar el rendimiento que ofrece esta chaqueta Ermes de Tucano sobre una moto en la ruta. Una prenda práctica donde las haya para un uso diario, particularmente urbana, ideal en entretiempo y que preserva al motorista del frío en una buena parte del invierno mientras viaja también por la autopista.

Lista de Motos de la prueba

Aprilia Caponord Rally

Kawasaki Z 300

Kawasaki Vulcan Custom

MV Agusta Turismo Veloce

Aprilia Tuono 4

Yamaha Xmas 250

BMW GS 700 y GS 800

Guzzi V9 Roamer

Triumph Street Triple 675 R

Yamaha XJR 1300

Guzzi V9 Bobber

Hyosung GD 250 R

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